Fuente: El Peruano – Dom. 06/12/2020
Los sonados triunfos del judo peruano en los torneos internacionales son productos de la planificación de los integrantes de la Unidad Técnica de la Federación Peruana de esta disciplina, liderada por María Martínez, quien inculca la mística de sacrificio a los deportistas peruanos. Eso se refleja en cada actuación porque salen a competir con fuerza sobre cualquier tatami del mundo.
María sostiene que aprendió a tener una visión del judo más allá del aspecto deportivo. Cree que una de las fortalezas para hallar las victorias es haber convertido al deporte en su familia. A eso se suma el compromiso de los dirigentes de brindar los mejores recursos a cada exponente, con el propósito de tener un entrenamiento del más alto nivel.
“Nuestros judocas salen a competir de igual a igual contra cualquier oponente del mundo. Hemos convertido al judo en una familia. Los deportistas trabajan con los mejores implementos, no tienen nada que envidiarle a nadie. Hemos sembrado la nueva generación del judo y seguimos batallando para que nuestros proyectos no se detengan y para que el deportista sea profesional”.
La también entrenadora resalta que en la Federación Peruana de Judo cada uno hace su labor en busca de maximizar los resultados.
“El trabajo es un esfuerzo conjunto de deportistas, entrenadores, de la parte administrativa que se preocupa para que nada les falte a las personas que van a competir. No son logros que caen de la noche a la mañana, sino horas y horas de sacrificio, de estar lejos de la familia, de corregir errores”, indicó.
En el Panamericano de Guadalajara 2020, Perú cosechó 8 preseas, de las cuales 3 fueron de oro.
“Las 8 medallas y el tercer lugar por equipos en Guadalajara es el sostenimiento de un trabajo que se inició hace años y que tuvo como objetivo que nuestros deportistas se dedicaran al cien por ciento a entrenar, que tuvieran lo mejor para que estuvieran concentrados a la hora del combate”, manifestó.
Uno de los cambios que se hicieron en la FPJ fue brindar las mismas posibilidades a todos los exponentes. Es decir, que viajaran todos a competir porque se planea que los peleadores puedan asistir a 20 certámenes internacionales al año; se brindó capacitación a los técnicos y árbitros. También se priorizó la descentralización de la disciplina.
Futuro inmediato
Las figuras nacionales absolutas compiten en el Open Panamericano Lima 2020, que culmina hoy en la Villa Deportiva Nacional, donde los peruanos buscan acumular puntos con miras a clasificar para los Juegos Tokio 2020.
La senséi Martínez no se detiene en analizar solo el aspecto competitivo del deportista en el presente, sino también lo proyecta para que tengan un futuro fuera del rigor de los combates.
“Uno de los puntos importantes que hemos logrado con el personal de trabajo del judo es estar listos para realizar en cualquier momento eventos deportivos de gran dimensión. También nos preocupamos por el después. Queremos que luego de terminar su carrera deportiva, los atletas se preparen para ser dirigentes, entrenadores y desarrollen gestión deportiva. Nosotros ya vemos el perfil de cada uno de ellos”, agrega la senséi Martínez.